Un ejemplo de que los sueños son más grandes que las dificultades es Francisco Cayulef, tenista en silla de ruedas desde hace más de 15 años que ha logrado destacarse en el mundo del deporte por encima de cualquier cosa, su historia es conmovedora e inspiradora.
Nació con una malformación congénita que lo trajo al mundo sin las extremidades de las piernas, a sus 32 años ya es un destacado tenista profesional que ha sumado muchos logros y una carrera deportiva notable, ha viajado por múltiples países gracias a su calidad de deportista donde ha podido representar a Chile en diversas actividades deportivas de gran importancia como Olimpiadas y más.
Su rehabilitación fue una parte fundamental de su formación como deportista, formó parte de la Teletón donde estaba tratando de caminar con prótesis y allí, con la alta presencia del deporte, pudo descubrir esta pasión y asegura que fue lo que le dio más vida. Conozcamos más de su magnífica historia.
Cuéntanos un poco sobre ti
“Mi nombre es Francisco Cayulef, nací con una malformación congénita en mis piernas, lo que quiere decir que nací sin ellas. Ahora soy deportista paralímpico y ya llevo más de 15 años jugando al tenis en silla de ruedas, es mi profesión. Tengo 32 años y aunque nací en Coyhaique, me vine a Melipilla cuando tenía tan sólo dos meses por lo que puedo decir que soy de Melipilla de corazón (risas).”
¿Cómo iniciaste en el mundo del deporte?
“La verdad es que me inicié, así como parte de mi rehabilitación, estaba en la Teletón tratando de caminar con unas prótesis y parte de estar todo el día en la Teletón era hacer deporte y ahí empecé con natación, con tenis de mesa, hasta que llegué a lo que es el tenis y dije ‘esto es lo que quiero hacer’ por el resto de mi vida”.
¿Cuál fue tu principal motivación para iniciarte en el mundo del deporte?
“Creo que tuve muchas influencias de la época como, por ejemplo, estaba el boom del Chino Ríos, además también resaltaban otros factores como la posibilidad de viajar, de conocer otras culturas y yo creo que todo eso me fue como engatusando y la verdad terminó más que enamorándome. Comencé a hacer deporte cuando tenía 12 años y también lo hice para descubrir que podía tener otras capacidades y esto me llevó a tomarlo de manera profesional y las condiciones que tenía también entonces dije ‘ya, quiero ser un tenista profesional’ y así fue”.
¿Cuáles han sido tus mayores logros?
“Mis mayores logros son varios, entre ellos haber representado a Chile en siete mundiales ya, en Parasudamerican, dos parapanamericanos. Yo creo que uno de mis grandes logros fue sin duda clasificar por mis propios méritos a una olimpiada o cualquier otra actividad, por mi rendimiento y a pesar de que perdí en primera ronda de algunas categorías, igual creo que lograr ese sueño que tenía cuando comencé a jugar tenis y que alcancé en un plazo de 4 o 5 años, lo que significa que no me demoré mucho en mejorar mi rendimiento, fue muy satisfactorio y en verdad era lo que quería, así es que eso lo puedo considerar como un gran logro. Además, participar en las olimpiadas de Bejing, China, también fue algo máximo para mí”.
¿Qué significa el deporte en tu vida?
“La independencia y la personalidad que me dio el deporte es impagable. Este sueño de representar a Chile, de estar en juegos tan importantes, aunque han sido un gran tiempo de sacrificio, de esfuerzo, de perseverancia, ha valido la pena y me permite llegar a lo más importante como alcanzar una medalla y seguir destacándome en lo que hago”.